YA NO ES UN ZULO

Montar mi cuarto es un ritual que toda persona que haya convivido conmigo conoce.

Se puede prolongar a lo largo de varios días y me sume en un estado de concentración mayor que hacer un examen de matemáticas aplicadas.

Pongo el iTunes en modo aleatorio, y empiezo a abrir cajas. Esas en las que acumulo pequeños papeles, fotos u objetos que me teletransportan a tiempos lejanos.

Y suena "años 80" y veo a mi yo teenager, rodeada por esas mozuelas que ahora trabajan, opositan o se masterizan, con unas cariñas de crias que valgamedios! Entonces salta a "Copenhague" y sigo pegando fotografías que narran viajes, "pretty woman", fiestas "toda la noche en la calle", el Colegio Mayor "material girl", noches en Vigo "take me out", noches de verano "cómo te mueves", Baiona "turnedo" y familia, sobre todo, familia. Mis hermanos "Mr Jones", mis padres "I've Got Dreams To Remember"...de las Navidades "Yolanda", de los primos "cadillac solitario"...

Chapas, postales, perchas de cuando era pequeña, dibujos, muñecos articulados, pistolas de plástico, lápices, rotuladores. La radio suena de fondo y esto ya deja de ser un trastero para convertirse en la república independiente de mi cuarto.

Bienvenido a Eloy, última puerta a la derecha.