TODO SOBRE MI ABUELA

Así titulé un escrito hace 8 años cuando, contra tu voluntad, te volviste dependiente de la silla y de tus hijos y en él describía cómo gracias a esa misma voluntad lo supiste llevar como nadie.

Debe ser duro, para alguien a quien recuerdo con un estilo impecable, en tacones, labios de rojo y falda planchada antes de salir, enfrentarse a esa nueva etapa en la vida cuando estaba ya tan avanzada. Pero es que tú querías vivir. Y querías vernos. Y así lo hiciste. Seguiste presenciando cómo nos multiplicamos, cómo festejamos cualquier ocasión y cómo nos reunimos bajo cualquier pretexto con el sello de la casa, alrededor de una mesa llena de comida, para acabar discutiendo y cantando entre pitillos, cafés y cartas. Como a ti te gusta.

Pocas personas conozco que hayan dado tanto ejemplo como tú. Sí, tú. Más lista que Gil Robles, aleccionando con tu saber estar, con tu saber hacer, dejando que los demás vivan su vida pero preocupándote por todo y por todos. Cuidándonos hasta el final. Regalándonos conversación, anécdotas y esa carcajada tan tuya que nos lleva a nietos e hijos, como bien te cantábamos  hace unos cuantos años, a "ir presumiendo de ser Brandón"

Pues claro que presumo de abuela. Y lo haré siempre. Porque es mucho lo que conseguiste y mucho lo que nos diste. Me diste a mi familia. A esa gran familia con la que comparto muchos de los mejores momentos de mi vida. Conseguiste un núcleo sólido. Una máquina engrasada compuesta por piezas muy diferentes pero fundamentales todas ellas. Desde aquí quiero asegurarte que va a seguir funcionando, aunque nos faltes. Aunque tú ya no estés, te recordaremos como lo que fuiste toda tu vida: una madre, una abuela, una señora y por encima de todo, una persona extraordinaria.

Nos enseñaste a disfrutar de la vida porque es, como le dijiste a mi padre y este me repite siempre que tiene ocasión, la mayor aventura que le puede suceder a un ser humano.

Yo firmaba por una como la tuya.

Sólo me queda darte gracias abuela Pita. Gracias por los desayunos en Baiona, por los fines de año, por tus hijos, nietos y bisnietos. Gracias por recordarme cómo era el abuelo, por darnos dinero a escondidas, por hacer de García Barbón 52 la casa de todos. Gracias por las partidas de mus, por los merengues, por tu generosidad infinita. Por hacer que cada acontecimiento fuese especial, por tu mal comer, por tus cigarrillos BN, por tu gusto por los detalles. Gracias por ser "la Jefa", por hacer las cosas bien incluso cuando todo va mal. Por alegrarnos la vida. Por enseñarnos tanto. Por estos 25 años contigo que se me han hecho cortos, pero tú también te mereces un descanso. Gracias en mayúsculas por tu humor, ese que te acompañó hasta el final. Gracias por ser como fuiste y por hacernos la vida mejor a los de alrededor.

Gracias por todo abuela, sé que lo hiciste encantada...te vamos a echar muchísimo de menos.

POR MÍ Y POR TODOS MIS COMPAÑEROS SIN TRABAJO (Y POR MÍ PRIMERO)

Estoy en tránsito.

Estoy y no estoy.

Un momento de incertidumbre (para mí, el peor de los estados) como este, quien más, quien menos lo ha pasado todo el mundo...y superado. Y no es que crea que no va a pasar, porque está claro que voy a acabar trabajando e incluso añorando estos días de no tener nada concreto que hacer más que refrescar la página de infojobs. Pero es inevitable estar con una continua duda. Pasar de la gana a la desgana en menos que se lee otra cifra desanimante.

El paro, los plazos, las becas, los comentarios, los jóvenes, los mayores, la crisis, las gráficas, los 3 años de experiencia requerida, la edad...

La edad? qué edad...25 años y según los cálculos del señor de gafas oscuras esto no ha hecho más que empezar...

Con calma.

Ordenamos cuartos pues. Hacer limpieza de cuarto como metáfora de limpieza de cabeza.

Sacamos cajas. Y entre polvo e instrucciones de IKEA nos encontramos con todos (o casi todos) los pinceles que he tenido en mi vida...madre mía filliña, síndrome de Diógenes! "pero es que a lo mejor los utilizo para..." parece que es mi lema. Conociéndome, dedico una caja bien grande a "materiales" (plásticos, papeles, alambres y cordeles) otra a "letras" (corta, pega, haz mensajes tipo asesino en serie que tú para eso sí que vales) otra la llamaremos "caja inspirante" y qué encontramos aquí? pues muy fácil, las trapalladas, objetos absurdos, horteras, de chino, recuerdos, dados, llaveros, monigotes...TODO cabe en la "caja inspirante"

Esto va cogiendo forma. Forma de estantería EXPEDIT que bien valen 20 € "o incluso trinta" como me diría Gloria esta mañana después de preguntarme 3 veces si necesitaba ayuda para montarlas "no...que esto es muy fácil" y luego volver a ver el resultado y confirmar "Ay pues se te da bien isto eh?"...si ella supiera que me lo explican todo unos monigotes sin nada de letra...

Llegamos a las cajas de recuerdos.

La de las fotos. El señor de gafas oscuras sin canas, la señora que calceta ochentena, Santi con la onda en un pelo engominado, Manu sin barba, cuando era Manolito...noches de Vigo, de Madrid, de Verano...ojos de niños, arrugas que no están, pelos que cambian, caras que se afilan, ropas que te hacen suspirar (bien por mal, bien porque lo tiraste y nunca debiste hacerlo)

Otra con todo lo que mis cuartos han visto pegado (con blue tack que cada junio se convertía en una bola gigantesca que arrancaba parte de gotelé) en todos mis años en Madrid...postales, entradas, dibujos, posters, notas, papelitos que en su momento tuvieron sentido...y todo conservado durante 6 años, despegado, repegado y vuelta a empezar. Eran "mis cuartos" como he bautizado una carpeta de fotos en la que si uno observa bien se puede ver una pequeña evolución pero todos muy semejantes...supongo que era mi forma de sentirme como en casa pese a que las paredes cambiasen año tras año.

Espera, y esto? Caja de apuntes. De la carrera, pocos...del colegio, más. "Un pronome átono nunca pode encabezar unha oración" el mapa político de África, los Reyes Católicos (se ve que le di más importancia a esto que al Derecho Canónico)...fotos de clase, dibujos de los 5 años...Oh, oh!...la "carpeta de las cartas"...y ahí estás todos esos Christmas que se enviaban a tus amigos de verano para que no te olvidasen llenos de buenos deseos y esperándonos ver pronto en la playa, esas notitas absurdas de clase, esas contracciones imposibles y "k" que no han lugar...esos "no entiendo nada" "me gusta este" "tía es que no sé qué te pasa últimamente, vale, todo es una mierda pero..." Ay! cartas adolescentes que son el horror pero que me hacen ver que si hace 10 años era así, qué pensaré de mi yo actual dentro de otros tantos...

y otra vez a vuelta con ese futuro incierto...

Porque aquí estoy, en un cuarto a medio montar, entre libros, acrílicos, papeles y fotos de ayer esperando a que hoy abra mi buzón de entrada, como cada mañana. Esperando que le de al aleatorio de iTunes, a que siga ordenando mi vida mientras espero a que empiece lo siguiente. Lo que toque. Lo que sea. Esperando algo. Mientras llega, seguiré atrapada en el tiempo y como Bill Murray intentaré hacer algo distinto cada día (menos suicidarme de todas las formas posibles, claro) Veo, dibujo, pinto, escribo, leo, escucho...hasta que un día lo oiga..."estás contratada"

SINSENTIDOS DE LA INFANCIA


Hay una serie de gritos de guerra infantiles que de vez en cuando rememoras bien sea en coñas absurdas o porque simplemente te dio un arrebato de nostalgia escuchando a las nuevas generaciones jugar expresándose con una jerga que parece una evolución de la que utilizaste en su día.

Encontramos los clásicos "Rebota y explota" o "quien lo dice lo es y tiene el culo al revés"...cuya evolución asquerosa podría ser "Háblale a la mano"
Que si "No vale furar" o "Por mí y por todos mis compañeros" (y qué solidario parece hasta que llega el "y por mí primero") o las cancioncillas con tufo a pufo para ver a quién le toca quedar a la pita (o a Marco Polo que no hay peor trago que ese...vacile gratuito oiga!). Por favor, analicen: "Pito pito gorgorito...dónde vas tú tan bonito...a la era verdadera...pin, pon fuera" Cuál es la era verdadera?? cuál? y luego venía el atraco a mano armada que era que si le tocaba a un amigo tuyo o a ti mismo, alargabas la canción con un "sa-les-y-que-das-tú" venga hoooombre!! fuera!!

De la jerga más adolescente me informa Feli, que tiene unas sobrinas en edad de merecer (de merecer un par de leches)...y te dicen "qué friki eres" o alguna hija de alguna prima que me suelta un "te estás yendo" y se queda tan pancha. Porque se creen muy guays. Pero hay que dejarlas. Porque el mundo a esa edad ya es suficientemente cruel y es muy difícil escoger con qué frase de qué canción de amor desesperada vas a actualizar tu estado de messenger y con cuántos corazoncitos y estrellitas vas a decorarlo. (Aunque mejor yo de actualizaciones de estado no hablo que voy bien servida...eso sí, sin corazones rotos ni días en que "estoy mal")

Pero volviendo a esos años un poco (sólo un poco) más inocentes que la adolescencia, esos años de infancia perdida en la que juegas con todos, se recuerdan aquellos "pido no" o "me pido delante" en lucha con tus hermanos o "bocio permanente quien me de chupa 20" (que hay que ser cerdos...)
Y aquí es donde encuentro una expresión que me produce unas dudas terribles sobre su funcionamiento. Porque más que una expresión era una contraseña, una obligación a estar constantemente alerta. Vamos a ver...qué narices es eso de "PRI CON PRI!"

Cómo funcionaba? Y aquí surge el debate. Porque me pregunto yo...si alguien dice "pir con pri" el siguiente sólo tiene que decir "pri" para ser ese "pri" de "Pri con pri"? Según Blanca es que alguien decía "jugamos al tenisPRI CON PRI" (así todojunto) y otro alguien tenía que decir también "pri con pri" (y casi siempre estos dos estaban compinchados...aunque esto también puede entrar dentro de las teorías conspiranoicas de Blanca)
Luego María, para darle todavía más chicha al asunto, me recuerda que luego existía el "Se con se". Yo ahí ya digo basta. Que no puede ser. "SE CON SE" y otra vez la misma duda...entonces el siguiente dice sólo "se"?
Finalmente mi vaga, ausente y en la mayoría de los casos incompetente (que ni que fuera funcionaria) memoria, decide hacer acto de presencia y recordar que sí, que había hasta un "ter con ter".

Y aunque después de reírnos mucho yo sigo sin entender muy bien cómo iba el rollo este (si alguien puede arrojar luz sobre este asunto, adelante) me acordé también de lo chungo que era ser tan poco espabilada (yo) como para que después de que ya hubiesen dicho "Primer!, según!, tercer!" te tocase decir...qué? "cuarter"? pues no. Eras cuarta y punto. Eras una pringada también. Pero este es otro tema.

En fin, la infancia...en ocasiones es mejor no tener buena memoria...



 

ANSIEDAD DOMINICAL

Yo soy fan del Domingo Horizontal que básicamente consiste en tumbarse en la cama o el sofá o alternarlos y ver series y películas y comer guarradas. El Domingo Horizontal pega mucho con aquellas Resacas Colectivas que hacían tan llevaderos los domingos allá por el año 2009 (cuando aún no éramos muy conscientes de la que se nos venía encima y mi futuro era cierto y seguro).

Lo que ocurre es que de un tiempo a esta parte (desde que he vuelto al hogar parental, como tantos otros jovenzuelos preparados y sin sueldo) los domingos me levanto e intento ser persona. Esto está bien, porque me levanto e interactúo con otros seres que a lo mejor están igual que yo (de mal) pero han hecho un esfuerzo por salir a las calles a tomar el aperitivo (o el brunch porque ahí se juntan tostadas con empanadas). Luego como en casa de la abuela, discuto por enésima vez con mi padre y mi tío sobre los beneficios de Internet, escucho unas cuantas veces "cómo va lo de la búsqueda de trabajo" y cuando se empieza a acomodar la gente en el sillón, vuelvo al hogar. Rondan las 4. Y ahora qué? Mandas whatsapps al infinito esperando respuestas de otros hongos que están en sus sofás tirados, como tú y finalmente desistes y te pones en plan de casa. Con parte de abajo de pijama y todo. Y Youtube. Y alguna revista. Y viaje a la nevera. Y alguna noticia. Y venga, una peli. Una serie. Y otro viaje a la nevera... "Carmen, qué buscas?" "Trabajo!...pero en la nevera no sé lo que busco..." "Claro, es que ni ella lo sabe" Pues no. Aquí empiezo a analizar y es que no sé que quiero. No sé qué quiero hacer, ni qué quiero comer. No sé si estoy bien, mal o regular. No sé nada (aunque supuestamente esto era lo único que tenía claro Sócrates) Bien. Pues yo igual. Sólo tengo claro que no sé nada y que me invade la ansiedad.

Y por qué? se preguntarán muchos (entre ellos Mourinho)...si ni si quiera trabajas mañana! Pues no lo sé. Pero es un hecho. Da igual si salí ayer o no. Si hace buen día o malo. Yo estoy así. Que no sé.

Qué tengo doctor? Ansiedad Dominical. (que bien podría ser el nombre de un grupo punk de un sólo éxito: "No kiero kurrar, yo valgo pa' beber, solo kiero comer keso y no pensar en eso"...Pura poesía)